Cómo hacer caldo de paella de marisco casero
- Seviara Los Pucheros del Marqués

- 1 oct
- 5 Min. de lectura
No es el arroz. Tampoco es el fuego. Ni siquiera la paellera gigante heredada de tu suegro.El secreto verdadero —ese que huele a mar y a domingos en familia— está en el caldo.
En Los Pucheros del Marqués llevamos años cocinando paellas para eventos, comuniones y comidas de empresa. Y si algo hemos aprendido es que un buen caldo es como una banda sonora: no siempre se nota... pero si no está, se echa en falta. Así que hoy vamos a contarte cómo hacer caldo de paella casero, de marisco, como debe ser.
Un fondo potente, natural, sabroso, que no tape al arroz, sino que lo abrace.
Qué vas a aprender aquí (y por qué no volverás a usar pastillas de caldo nunca más)
Esta guía no es una receta más. Es un manual para que entiendas el porqué de cada ingrediente, cada paso, cada matiz. Vas a descubrir:
Qué diferencia hay entre caldo de marisco, fumet de pescado y fondo de arroz.
Cómo sacar todo el sabor de unas cabezas de gamba sin quemarlas.
Por qué el caldo debe cocinarse con amor (y nunca con prisas).
Qué errores evitar si no quieres una paella con sabor plano.
Y cómo conservar tu caldo para futuras comidas memorables.
Además, repartiremos recursos útiles y enlaces a lo largo del artículo, por si prefieres que te lo cocinemos nosotros 😉

¿Qué es exactamente un caldo de marisco bien hecho?
Un caldo de paella casero no es un simple líquido caliente con gusto a algo. Es una construcción lenta, aromática y profunda. Como un buen vino o un guiso de la abuela. Aquí se cuece lo esencial: el alma de tu arroz.
Un buen caldo de marisco debe:
Oler a cocina marinera, no a pescado.
Tener un color dorado intenso, como si llevara horas al fuego (porque las lleva).
Tener cuerpo, pero sin ser una sopa.
Equilibrar dulzor, salinidad y ese toque umami que te hace salivar sin darte cuenta.
Y sobre todo, debe estar hecho a fuego lento, sin prisa y con ingredientes reales.
Ingredientes esenciales (y los errores que todos cometemos)
Lo que sí debes usar
Cabezas y cáscaras de gambas, gambones o langostinos. Lo bueno está en la cabeza.
Espinas de pescado blanco: rape, cabracho, dorada. Nada de pescado azul.
Verduras frescas: puerro, zanahoria, cebolla, tomate. El clásico sofrito, pero para fondo.
Aceite de oliva virgen extra. No escatimes aquí.
Ajo y laurel, los aromáticos que suman sin robar protagonismo.
Lo que NO deberías añadir (por mucho que lo hayas visto en TikTok)
Pescado azul: bonito, atún, sardina… amargan y enturbian.
Apio y pimiento: tapan todo con su sabor invasivo.
Tinta de calamar: mejor para el arroz negro.
Pastillas, concentrados, caldos comerciales. Esto es cocina, no química.
¿Cómo se hace un buen caldo de paella de marisco paso a paso?
Ahora sí, pongámonos el delantal. Aquí va el proceso completo, con explicación para cada gesto.
Paso 1: Sofríe las cabezas y cáscaras como si fueran oro
Pon un buen chorro de AOVE en una olla grande. Añade las cáscaras y cabezas.Máchalas con la cuchara de madera mientras se doran. Esa grasa coralina es puro sabor.
Cuando estén bien tostadas (sin quemar), añade el ajo picado y deja que perfume.
Consejo de chef: si tienes un poco de brandy, añade un chorrito y flambea. El alcohol se evapora y queda un toque de fondo espectacular.
Paso 2: Verduras al rescate
Incorpora el puerro, la cebolla, la zanahoria y el tomate maduro rallado. Sofríe todo junto durante 15-20 minutos, removiendo de vez en cuando.
Este paso es importante. Aquí no vale ir con prisas. El sofrito le da al caldo su base dulce y tostada.
Paso 3: Añade agua caliente (no fría, ojo)
Agrega agua caliente hasta cubrir todo y un par de dedos más.
¿Por qué caliente? Para que no se corte la cocción ni se enfríen los sabores que has creado.
Lleva a ebullición, baja el fuego y espuma bien (retira con una cuchara la espumilla gris que sube).
Paso 4: Cocción lenta y sin tapar
Deja cocer durante 35 a 45 minutos. Ni más ni menos. Si lo dejas 2 horas, amargarás el caldo. Si lo quitas a los 10 minutos, sabrá a poco.
Paso 5: Colar con mimo
Pasa el caldo por un colador fino. No aprietes los sólidos, solo deja que caiga lo que fluya solo. Así evitas que quede turbio o pastoso.
Y voilà. Ya tienes un caldo de marisco casero para paella, listo para usar o guardar.
Diferencias reales entre caldo de pescado, caldo de marisco y fumet
Para que no te líes más:
Tipo de caldo | Base principal | Ideal para… |
Caldo de marisco | Cabezas/cáscaras | Paella de marisco, fideuá |
Caldo de pescado | Espinas y cabeza de pez | Arroces suaves, sopas marineras |
Fumet | Pescado + marisco + vino | Bases complejas para salsas |
¿La mejor opción? Hacer mezcla. Un poco de espina de rape y unas gambas, y tienes oro líquido.
¿Y si no te da la vida para hacerlo?
No pasa nada. Para eso estamos nosotros. En Los Pucheros del Marqués te ofrecemos paellas de marisco de verdad, cocinadas con caldos como este, sin trampas.
Si tienes una celebración o simplemente quieres darte un homenaje, puedes pedir tu paella a domicilio en Madrid, lista para comer, hecha como en casa (o mejor).
Cómo conservar tu caldo casero (y no morir en el intento)
Opción 1: En la nevera
Aguanta 3-4 días. Usa botes de cristal herméticos y etiqueta con la fecha.
Opción 2: Al congelador
Lo ideal es dividir en bricks de 500ml o en cubiteras. Así tienes dosis exactas para una paella para 2 o 4 personas.
Tip: si haces mucha cantidad, puedes usar parte para fideuá o incluso una sopa marinera rápida.
Variaciones según el tipo de arroz que vas a preparar
Para paella de marisco seca
Caldo más reducido, potente. Que casi se pueda cortar con cuchillo. Este es el que hace que un arroz quede con sabor sin necesidad de salsas.
Para arroz caldoso
Usa más cantidad, menos concentrado. Aquí el caldo es protagonista, no actor secundario.
Para fideuá
Añade un punto más de ajo y tomate. Y si te atreves, un golpe de ñora.
Trucos de cocinero para que el caldo sea tu nueva religión
No eches sal al caldo. Mejor añadirla al arroz después. Así controlas el punto justo.
Tuéstalo todo por etapas: primero cabezas, luego verduras, después tomate.
No lo tapes al cocer, o se condensa el vapor y pierde intensidad.
Haz más de lo que necesitas. Siempre lo vas a agradecer.
Y si después de todo esto te queda un arroz mediocre…échale un vistazo a esta guía sobre cómo hacer arroz perfecto, donde desgranamos todos los tiempos, medidas y técnicas que usamos en nuestros eventos.
Preguntas frecuentes sobre caldos para paella
¿Sirve cualquier cabeza de marisco?
Sí, pero cuanto más frescas, mejor. Las congeladas también sirven si no están pasadas.
¿Puedo hacer el caldo el día antes?
Claro. Incluso al día siguiente sabe mejor. Como los guisos.
¿Qué hago si me queda muy líquido?
Redúcelo a fuego suave sin tapa. Que evapore despacio. Y nunca lo espeses con harina, por favor.
¿Me vale como base para sopas?
Sí, aunque puedes aligerarlo un poco. Ideal para una crema de marisco o un arroz caldoso improvisado.
Cierre: una paella sin buen caldo es como una orquesta sin violines
Ahora ya lo sabes. Si quieres una paella con sabor auténtico, el camino empieza por el caldo.
Y si un día no puedes (o simplemente no te apetece ensuciar cazuelas), recuerda que en Los Pucheros del Marqués cocinamos como tú lo harías... pero para 20, 30 o 100 personas.
Si tienes un evento o celebración a la vista, pide tu presupuesto de catering personalizado y olvídate de cocinar, recoger y limpiar.
Porque en la cocina, como en la vida, hay cosas que es mejor dejar en manos de quien sabe.







Comentarios